PNV, EH Bildu y PSE han sumado sus votos para sacar adelante una proposición no de ley transada entre estas dos últimas formaciones. El texto ha contado con el apoyo del parlamentario del PP y alcalde de Gasteiz, Javier Maroto, que se ha desmarcado del resto de sus compañeros como ya hizo el pasado 6 de junio. Gorka Maneiro (UPyD) se ha abstenido, si bien en el estrado se ha declarado favorable a la energía nuclear.
El texto aprobado rechaza la necesidad de reabrir esta central –actualmente en situación de parada– porque «no aporta nada a las necesidades energéticas» y es «una energía potencialmente insegura de por vida y porque la sociedad actual apuesta por energía renovables».
Además, la Cámara insta a las empresas Iberdrola y Endesa, propietarias de Garoña a través de Nuclenor, a «escuchar la voluntad de la mayoría social vasca y a renunciar a una prórroga que permitiría el reinicio de la actividad de una central nuclear obsoleta y peligrosa». También exige al Gobierno de Madrid que se inicien los trabajos de desmantelamiento de esta infraestructura.