El president en funciones de la Generalitat, Artur Mas, ha comparecido esta mañana ante la prensa para valorar los resultados de las elecciones del domingo, sobre las cuales ha declarado que demuestran la apuesta «clara, rotunda y transversal a favor del derecho a decidir». También ha abierto la puerta a un apoyo de ERC desde fuera del Govern. Pese a que la fórmula «ideal», según Mas, sería la de una coalición, ha admitido que no parece posible, por lo que ha reconocido como posibilidad «una fórmula de máxima estabilidad», que pasaría por un apoyo «permanente» de ERC al Govern.

Según ha declarado, el apoyo de ERC desde fuera del Ejecutivo se traduciría en un «programa conjunto», en el que todos «hagan aportaciones y algunas renuncias, y que haya también confianza mutua». En este sentido, Mas ha reconocido la receptividad mostrada por Oriol Junqueras en su reunión del miércoles, algo que le empuja a pensar que «esto puede salir bien». También ha reiterado su compromiso con que la consulta se celebre a lo largo de esta legislatura.

Sobre la posibilidad de llegar a acuerdos con ERC y con el PSC, ha recordado que CiU comparte con los republicanos los dos grandes objetivos de la agenda política: la superación de la crisis y el ejercicio del derecho a la autodeterminación. Sobre el PSC ha avanzado que habrá que ver «hasta qué punto pueden compartir estos dos objetivos» y ha recordado que todavía no se ha reunido con el secretario general, Pere Navarro, ya que ayer canceló la reunión que tenían prevista.

En clave interna, Mas ha opinado que ahora «todos los diputados de CiU son claramente favorables al derecho a decidir», aunque ha admitido que eso no comporta necesariamente que sean favorables al Estado propio. «De eso hablaremos más adelante», ha sentenciado. Por otro lado, también ha señalado que «el españolismo más duro es minoritario».