Unas 2.000 personas han participado en la manifestación que cada año se convoca en Bilbo coincidiendo con el día grande de Aste Nagusia. La convocatoria, realizada por EH Bildu, se ha desarrollado bajo el lema «Sasi guztien gainetik, Euskal Herria martxan».
La previa ha estado marcada por la orden remitida por la Audiencia Nacional a las distintas Fuerzas de
Seguridad del Estado (Guardia Civil, Ertzaintza y Policía española) para que grabasen la movilización, en un episodio más del estricto control vivido en las últimas semanas desde que la Delegación del Gobierno puso en marcha su persecución contra la txupinera, Jone Artola. En las inmediaciones de la cabecera se han visto rostros conocidos como los de Laura Mintegi, Oskar Matute, Joseba Permach, Hasier Arraiz, Unai Ziarreta o Tasio Erkizia.
Tras un recorrido de poco más de media hora, la marcha ha llegado a la parte delantera del Ayuntamiento, en cuyas escalinatas han tomado la palabra la edil bilbaina Aitziber Ibaibarriaga y el parlamentario Oskar Matute. La primera ha criticado el affaire en torno a la txupinera y ha denunciado que «Madrid siempre buscará una excusa para seguir criminalizando», mientras que Matute ha hecho una lectura más general.
En el plano económico ha acusado al lehendakari Urkullu de «vender humo» al declarar ayer que lo peor de la crisis ya ha pasado, lo que a su juicio supone «una falta de respeto hacia miles de trabajadores y trabajadoras». En el plano político ha comentado que EH Bildu mantiene su compromiso de «abonar y alimentar» el camino marcado en la Conferencia de Aiete y en las recomendaciones de los expertos en resolución de conflictos.