ESK, ELA, SATSE, UGT, LAB y CCOO han denunciado que «esta actuación solo busca el ahorro económico y repercute negativamente tanto para el personal como para quienes tengan que acudir a la Urgencia».

Han censurado que «el colapso de la Urgencia del hospital de Cruces es una situación que se repite con demasiada frecuencia y que obliga al personal a tener que trabajar con enfermos en los pasillos».

Según han indicado, este lunes, «a las ocho de la mañana, hay tres enfermos en los pasillos de urgencias y 32 personas pendientes de ingreso y todos los boxes duplicados e incluso varios triplicados». «Una situación que irá empeorando a lo largo de la jornada si no se adoptan medidas por parte de la gerencia», han advertido.

Asimismo, han señalado que «desde el viernes, día 27, y durante todo el fin de semana, el colapso era palpable, ya que los boxes estaban duplicados y había numerosos pacientes pendientes de ingreso».

«Esta situación tercermundista es intolerable, ya que impide ofrecer a los enfermos una estancia digna y supone la pérdida de intimidad y confidencialidad del paciente», han protestado, para añadir que «también supone que los trabajadores están sometidos a una fuerte presión sicológica por las condiciones del trabajo que soportan e inciden en el aumento del riesgo de errores».

Los sindicatos insisten en que es «una situación intolerable, consecuencia de una política de ahorro económico con la excusa de la crisis económica, apoyada en una falta de contratación de personal y de cierre de camas».

Por ello, han exigido a la dirección de Cruces que «se tomen medidas abriendo aquellas unidades que están cerradas actualmente con la contratación necesaria para ello».

«Estos hechos, por desgracia nada puntuales y por contra muy habituales en este centro, son la otra cara de Osakidetza y dicen muy poco a favor de la calidad de la asistencia sanitaria que tan a diario se pregona en términos de óptima desde la Consejería de Sanidad», han concluido.