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BILBO

«Hay razonamientos suficientes para que este proceso judicial sea un paso para la paz»

Mientras en Madrid el macrojuicio contra la juventud independentista vive sus últimas horas, en Euskal Herria, alrededor de 40 personalidades con trayectorias de lo más diferentes, han hecho suyo el alegato de los encausados, una clara apuesta por consolidar el nuevo tiempo y en favor de la resolución. «Hay razonamientos suficientes para que este proceso sea un paso para la paz y no una piedra de guerra», reivindican.

Jesús Eguiguren, presidente del PSE; la exdirigente de EA Begoña Errazti, la escritora Toti Martínez de Lezea, la exconcejal de Iruñea Ainhoa Aznarez, la portavoz del PSE en las JJGG de Gipuzkoa, Rafaela Romero o el alpinista Alex Txikon son solo algunas de las personas que han hecho suyo el alegato de los 36 jóvenes que han sido juzgados desde octubre –a los que hay que sumar los cuatro que decidieron esconderse, hoy todos encarcelados hasta el momento de que se les juzgue– en el tribunal especial bajo la única acusación de pertenencia a Segi.

La misma pluralidad de las personalidades que han mostrado su adhesión a la proclama, refuerza aún más el mensaje que transmiten en favor de la resolución y la consolidación del nuevo tiempo abierto en Euskal Herria.

El alegato ha sido presentado en Donostia, en presencia de algunas de las personalidades que han brindado su apoyo. En concreto, han estado el exciclista Mikel Astarloza, el exjugador de la Real Mikel Labaka, el actor Ramón Agirre, la bertsolari Alaia Martín, la parlamentaria navarra de EH Bildu Bakartxo Ruiz y el diputado de Amaiur en el Congreso Sabino Cuadra.

Los firmantes expresan su deseo de «construir puentes, donde antes solo había muros». A pesar de que «el nuestro ha sido un pueblo de bandos», reconocen que «tras más de dos años de proceso democrático» se ha constituido un nuevo sujeto, «un nuevo ‘nosotros’, ciudadanos vascos que apostamos por un nuevo tiempo futuro de paz y justicia, donde la confrontación se saldará, jugará y definirá en el ámbito meramente político».

Constatan asimismo que enrocarse en una «estrategia antiterrorista que responde al pasado es un ataque directo a la construcción del futuro de este país, por lo que señalan que «sobran todas aquellas actuaciones que pretenden levantar muros» para obstaculizar el avance del proceso.

El macrojuicio a los jóvenes, entre otras actuaciones, crea, según apuntan, «frustración» en una sociedad que «anhela ilusión» y que «desea construir un nuevo futuro en paz y basado en la justicia, el respeto y el reconocimiento».

En ese sentido, y tras recordar que lo que se ha juzgado ha sido la militancia política de los jóvenes, reivindican que también la justicia «se debe aplicar en términos de transición hacia un nuevo tiempo».

«Por todo ello –concluyen– en esta proclaman recogemos la reclamación de la nulidad del procedimiento, la absolución, el sobreseimiento o la forma que mejor convenga, pero queremos a estas 40 jóvenes libres».