El fiscal de la Audiencia Nacional española Carlos Bautista ha admitido hoy durante su informe que el criterio jurídico «ha variado» y que la mera autoinculpación policial «no es suficiente». Sin embargo, mantiene la petición de cárcel para los gasteiztarras Koldo Moreno, Xabier Fernández de Gamarra, Federico Lomas y Aitor Juárez. En concreto, el Ministerio Público solicita condenas de 27 años y cinco meses de prisión para el primero, 9 años y cinco meses para el segundo y 6 años para los dos últimos, después de añadir hoy otro delito de «desórdenes públicos» para Moreno y Fernández de Gamarra.

Bautista, en su intervención, ha reconocido que una inculpación no refrendada ante el juez no se considera suficiente para mantener una acusación. Y esto es, precisamente, lo único que sostiene sus tesis: la declaración ante la Policía española de uno de los jóvenes, que denunció posteriormente haber sido torturado, algo que reiteró también ante la sala. Por este motivo, buena parte de la argumentación del Ministerio Público se ha basado en tratar de desacreditar los relatos de malos tratos que pudieron escucharse la primera sesión del juicio.

La defensa, que insta a la libre absolución, ha recordado que no hay manera de acreditar que el maltrato no ocurrió. De hecho, hoy estaba previsto que se visionasen los vídeos de la detención. Unas grabaciones en las que puede apreciarse cómo los policías sacan de la celda en al menos dos ocasiones a uno de los detenidos y lo llevan a otra estancia, donde permanece por espacio de una hora, fuera del alcance de las cámaras. Estos movimientos se producen antes del momento en el que se realiza la declaración oficial. Se trata de unos indicios de los malos tratos que los jueces no han podido ver ya que en la Audiencia Nacional no había en ese momento material para poder visualizar el DVD.

De este modo, los abogados han dado por reproducida la prueba y serán los jueces quienes tengan que visionar los DVDs antes de dictar sentencia.

Tras las intervenciones de las partes el juicio ha quedado visto para sentencia.