Conversar un rato con Mirentxu Purroy debería ser asignatura obligatoria para cualquiera que pretenda ejercer de periodista en este país. En media hora que pasa como un suspiro, responde a las preguntas sobre los temas principales de una actualidad a la que mira con optimismo.

Por primera vez desde 1980, el PNV vuelve a colocar a su máximo dirigente como candidato a lehendakari. Una decisión mayoritaria de la dirección del partido –pero no unánime– que da la imagen precisa del grado de control que Iñigo Urkullu ha adquirido sobre el PNV, después de la convulsa elección y mandato de Josu Jon Imaz. El candidato ha mamado el partido desde su infancia y ha hecho toda la carrera interna que se espera de quien llega a la cumbre. Con fama de hombre serio, le acompaña el sambenito de «soso», que rompe en el trato directo. Según una encuesta es hasta sexy. Como Patxi López.

Estrategia aldaketa txalotzen du Filipe Bidartek, Iparretarrak inguruan ibilitakoek bezala. Aitzinatzeko, ezkerreko abertzaleen elkarlanean sakondu behar dela dio. EAEn «lortuko diren emaitza onak» gorabehera, Ipar Euskal Herriak, eta Nafarroa Garaiak ere, ezinbestean beren bidea egin beharko dutela uste du.

Patxi López es un hombre de partido desde que era niño. En el ocaso del franquismo, en su casa, su padre, Lalo López, celebraba reuniones clandestinas con gentes como Ramón Rubial, Felipe González y Manuel Chaves. Txiki Benegas lo conoce desde crío. Con 16 años se afilió a las Juventudes Socialistas y con 26 es secretario general de las JSE. Con 28, diputado en el Congreso. Mientras ascendía en el partido dejó aparcados los estudios, después de aprobar primero de Ingeniería Industrial en dos años. Ha tenido la suerte de apostar siempre a ganador: Redondo frente a Rosa Díez, Zapatero ante Bono... Ganó en Bizkaia y luego sustituyó a Redondo Terreros gracias al Pacto de San Marcos con Jesús Eguiguren. Como líder del PSE y candidato dijo en campaña que no pactaría con el PP, pero de su mano llegó a Ajuria Enea.

Por encontrarse fuera de Euskal Herria, Francisco Llera responde a las preguntas de GARA a través de un cuestionario. El director del Euskobarómetro apunta que existe en la sociedad una profunda crisis de confianza política que arrastra consigo a las principales instituciones.

Aunque haya trabajado siempre en el área de la publicidad, o precisamente por eso, este exprofesor de la UPV sostiene que la publicidad política tiene poco que hacer o cambiar en las elecciones. «A veces, nada», afirma con un punto de vista «pesimista, pero bastante pegado al suelo». En opinión de Álvaro Gurrea (Donostia, 1945), al que el retiro le ha dado el tiempo que necesitaba para escribir su primera novela, «Kosallu» (Ttarttalo), lo que decide los votos son los hechos.

Uste osoko independentista da Xabier Isasi (Deustu, 1956), bihotzez eta buruz, eta ilusio handiz hartu ditu Kataluniatik, Eskoziatik, Flandriatik eta Quebecetik datozen haizeak. Horretan kokatzen du EH Bilduk EAJrekiko duen aldea; azken honi ez dio ikusten lurralde krisi hori kudeatzeko gaitasun handirik, ez eta borondate argirik ere. Bere irakurketa ez da, ordea, horretara mugatzen; EHUn zein Gaindegian bildutako esperientziari esker, Gipuzkoa zein Euskal Herri osoaren gaineko ezagutza zehatza du.

El despacho de Emilio Majuelo en la UPNA es una atalaya inmejorable para otear desde Nafarroa la azotada realidad que nos rodea con ojo académico. Él es experto en Historia Contemporánea y no quiere ser más. «Manténme distante en la entrevista. No soy un estratega », advierte serio.

Jon Azua conoce todos los secretos de la administración, donde ha ejercido varios cargos, entre ellos el de vicelehendakari. También el mundo empresarial y el académico. Y, además, sabe «lo que pasa por el mundo». Y cuanto más conoce, más apuesta por la independencia.