Yolanda Barcina empleó su visita del lunes a la capital del Estado para hacerse autobombo en 13 TV. En ese canal se prestó a una mansa entrevista a cargo del exmoderador de «El gato al agua» que se centró en la polémica desatada en torno al modelo D. Barcina, que pronto comparecerá en el Parlamento, aprovechó la ocasión para exhibir dureza de carácter y, además, dio por buena la exagerada versión de lo sucedido que reflejan los medios españoles. «Si hay personas que pertenecen al entorno radical y están dando clase sobre todo para adoctrinar, lo que tenemos que hacer es actuar y erradicarlos lo antes posible», aseguró la presidenta.

Yolanda Barcina afirmó que habrá que cambiar cuantas leyes haga falta para perseguir a estos presuntos profesores díscolos de los que habla un supuesto informe reservado de la Guardia Civil. Sobre este documento policial -del que se llegó a decir que era un documento para una tesis-, aseguró que le fue remitido a ella directamente desde el Ministerio del Interior. Y la presidenta la otorga credibilidad. «Todo informe sobre el entorno y la actividad terrorista nos preocupa», sostuvo. En la práctica, Barcina avanzó que están valorando modificar el estatuto del funcionario, para poder elevar y ampliar las sanciones de quienes, presuntamente, adoctrinan en las clases.

Barcina tuvo la delicadeza de cambiar su canal de cabecera en Madrid. En su última visita acabó en el plató de «El gato al agua» original (el de Intereconomía), pero regresar a ese programa hubiera supuesto colocarse en el centro de la polémica. Precisamente ayer, su consejero de Educación tenía que dar explicaciones sobre su actuación después de que periodistas de «El gato al agua» se colaran sin permiso en un centro que imparte el modelo D en Iruñea grabando a menores bajo el título: «ETA se cuela en las aulas».

José Iribas pidió a los partidos calma y prudencia. Aseguró que la consejería de Educación ya ha hecho todo cuanto está en su mano para evitar que el reportaje viera la luz con caras de menores y, por tanto, descarta emprender nuevas acciones legales. En su descargo, recordó en varias ocasiones que quien más capacitado está para ir a los tribunales, serían los padres y las madres de los menores, pues ellos tienen la patria potestad o, en su caso, la Fiscalía .

Bakartxo Ruiz, de Bildu, le recriminó el hecho de pedir calma a los partidos mientras Barcina se dedica a reavivar el fuego en las tertulias madrileñas. El consejero negó la mayor, aseverando que la presidenta ha mantenido siempre una actuación prudente al respecto y que se limitó tan solo a «trasladar una legítima posición política». El resto de formaciones se mostraron críticas con la actitud de UPN y esperan a que el debate continúe con la comparecencia hoy del portavoz del Gobierno.