Ainara LERTXUNDI

Marruecos impide de nuevo la entrada en El Aaiún de solidarios con el Sahara

Las autoridades marroquíes prosiguen con su política de expulsión de El Aaiún de activistas o personalidades vinculadas con la defensa de los derechos humanos de los saharauis. Una de las últimas en ser expulsada ha sido la diputada de Amaiur Onintza Enbeita.

Amaiur solicitó ayer una reunión con el embajador de Marruecos en el Estado español, Fadel Benyaich, después de que el martes su diputada Onintza Enbeita fuera expulsada junto a otras dos personas, Mónica Alonso, de Mundubat, y Diana Fernández, de la Asociación de Amistad con el Pueblo Saharaui de Sevilla y RAAMS, del aeropuerto de El Aiaún, territorio saharaui ocupado al que viajó como parte de una amplia delegación que se disponía a participar en el Congreso internacional de solidaridad con las mujeres saharauis. Horas más tarde, expulsaron a otras cuatro personas, entre ellas, Itziar Fernández, de la ONG Mujeres Unidas por el Desarrollo.

«Cuando aterrizamos en El Aaiún y ya estábamos levantadas preparadas para bajar, nos comunicaron que solo podían salir del avión a aquellos pasajeros que tuvieran pasaporte marroquí. Nos quedamos en total siete personas en el interior del avión. Efectivos policiales intentaron entrar pero, el comandante del vuelo les recordó que no les está permitido. Al acercarnos a las escaleras, vimos que había un montón de cámaras policiales y, de manera ilegal nos cogieron los pasaportes. Al rato, llegó un hombre que se presentó como el alcalde de El Aaiún, quien nos acusó de haber ido con el objetivo de poner a una parte de la población en contra de la otra y que no nos permitía la entrada si no íbamos a proteger los derechos de toda la población», relató Enbeita a GARA.

«Nuestra expulsión ha sido ilegal y hasta cierto punto esperpéntica, porque un alcalde, que luego por fotos supimos que esa persona no lo era, no es quién para ordenar una expulsión», remarcó.

Por ello, Amaiur anunció que preguntará al Ministerio de Exteriores español si «conocía las pretensiones del Gobierno marroquí» y si tomará alguna medida al respecto. Exigió también a Madrid que «respete» las decisiones adoptadas en el marco de la ONU y defienda «los derechos nacionales que como pueblo le corresponden al Sahara».

El pasado viernes, otros cinco activistas de organizaciones pro derechos humanos fueron expulsados de El Aaiún.