Jon Ander Goñi
Responsable nacional del metal de LAB

Convenio del metal de Gipuzkoa: unidad y determinación

«La pérdida del convenio tendrá, sin lugar a dudas, consecuencias en todas las empresas y en todos los trabajadores y trabajadoras del sector. En algunos casos dramáticas ya que miles de trabajadores y trabajadoras que dependen de él en su totalidad se quedarían sin derechos, en otros los más afortunados que tienen un convenio o pacto de empresa también se van a ver afectados de manera importante ya que la empresa esgrimirá el argumento de la competitividad para rebajarles sus condiciones laborales».

Vivimos momentos difíciles las trabajadoras y trabajadores del metal. A la situación de inestabilidad laboral que vivimos actualmente como consecuencia de la crisis, hay que añadirle la situación generada por la reforma laboral que permite que puedan desaparecer los convenios del metal de la CAV si no se renuevan antes del 7 de julio.


Más de 130.000 trabajadores y trabajadoras en el sector podrían ver cómo se les aplica el Convenio estatal del metal o, en su defecto, el Estatuto de los Trabajadores.


Es decir, la posibilidad real de que todos los derechos conquistados durante más de 30 años de lucha puedan desaparecer. Sí, digo bien, lucha porque nunca nos han regalado nada y ahora tampoco va a ser la excepción.


La actitud de la patronal en defensa de la reforma laboral, una reforma laboral que desde su aprobación ha supuesto el período de mayor destrucción de empleo, una reforma laboral que muchos empresarios y empresarias están rechazando en sus empresas porque son conscientes de que no soluciona sus problemas, está poniendo en peligro un Convenio, el del metal de Gipuzkoa, que ha sido y sigue siendo referencia obligada en todas las empresas del sector y que ha solido marcar la pauta para otros sectores y convenios. Por todo ello, durante meses el sindicato LAB ha venido movilizándose en defensa del convenio, recogiendo firmas de adhesión al mismo en todos los centros de trabajo. Y, finalmente, LAB ha convocado en Gipuzkoa para el próximo día 24 huelga en el sector en defensa del mismo.


La pérdida del convenio tendrá, sin lugar a dudas, consecuencias en todas las empresas y en todos los trabajadores y trabajadoras del sector. En algunos casos dramáticas ya que miles de trabajadores y trabajadoras que dependen de él en su totalidad se quedarían sin derechos, en otros los más afortunados que tienen un convenio o pacto de empresa también se van a ver afectados de manera importante ya que la empresa esgrimirá el argumento de la competitividad para rebajarles sus condiciones laborales: «como el resto de empresas tienen condiciones laborales inferiores tendremos que rebajarnos aquí también o sino tendré que despedir o cerrar».
El convenio del metal ha sido siempre la base sobre la que hemos negociado siempre en las empresas, lo que nos ha unido a todos y todas las trabajadoras. Si esa base se pierde, los derechos conquistados en las empresas también los iremos perdiendo. Ya no seremos 50.000 trabajadoras y trabajadores luchando juntos, sino cada empresa por su lado y, en esas condiciones, la empresa siempre tiene las de ganar.


Por el contrario, si esa base se mantiene y además contiene cláusulas que limiten la aplicación de la reforma laboral, ello tendrá también un efecto positivo en las empresas.


LAB lo tiene claro, no vamos a regalarle ningún derecho a la patronal. Tenemos que defenderlos todos, tanto en el sector como en la empresa. En todos los sectores y en todas las empresas. Es en tiempos de crisis precisamente donde se hace más necesario que nunca tener un convenio digno que garantice derechos. 

 
En Gipuzkoa ya vivimos una situación similar a la actual en el año 2010. Entonces Adegi se las prometía felices. También entonces con la excusa de la crisis, Adegi quiso quitarnos muchos derechos del convenio pero la respuesta decidida y firme de las trabajadoras y trabajadores del sector, siete días de huelga, se lo impidió. Claves de aquel éxito: unidad y determinación. Esas mismas claves nos llevarán sin lugar a dudas a salvar el convenio de nuevo. Si todas y todos nos movilizamos en defensa del convenio, este es imparable y Adegi lo sabe.


¿Quién puede detener la fuerza de más de 50.000 trabajadores y trabajadoras decididos a defender sus derechos? Tienen enfrente a todas las trabajadoras y trabajadores, a todos los sindicatos e incluso a la sociedad. La patronal ya ha perdido de antemano esta batalla.


El día 24 volveremos a llenar las calles de pueblos y barrios en defensa de nuestro convenio, de nuestros derechos. Volverá a ser un día de movilización en el sector, trabajadores y trabajadoras de empresas pequeñas, grandes, con convenios de empresa o sin convenios, en situación de ERE o con carga de trabajo, todas y todos juntos en defensa de lo común, de un futuro con derechos y dignidad para todas y todos.


El día 30 volveremos a movilizarnos en defensa de una alternativa para este país a este modelo social y laboral perverso. Y entre sus muchas razones, también los metalúrgicos y metalúrgicas de LAB nos movilizaremos en defensa de nuestra negociación colectiva y, en nuestro caso, del convenio del metal. Y nos acordaremos especialmente de los trabajadores y trabajadoras de Corrugados Azpeitia,  Corrugados Lasao, Laminaciones Arregui, San Eloy e Iketz, Alfa, Perot, Troqueleria del Norte y de todas y todos aquellos que están luchando hoy por defender su puesto de trabajo y, cómo no, de quiénes lo han perdido, muchos como consecuencia de la reforma laboral. Nos acordaremos también de otros sectores en lucha como Residencias de 3ª Edad de Gipuzkoa. El día 24 estaremos donde debemos estar, con todos los trabajadores y trabajadoras del sector, defendiendo lo nuestro. ¡El 24 y el 30 tenemos una cita con la dignidad! ¡El 24 y el 30 nos vemos!

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