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JERUSALÉN

El preso palestino Samer Issawi, hospitalizado tras 210 días en huelga de hambre

Las autoridades penitenciarias de Israel han trasladado al preso palestino Samer Issawi a un hospital de Israel tras 210 días negándose a tomar alimentos, con algunas interrupciones en el ayuno, según ha informado la agencia palestina de noticias Maan.

Issawi ha sido ingresado en el centro médico Kaplan, ubicado en la localidad de Rahavot, en estado estable, según ha informado Sivan Weizman, portavoz del Servicio de Prisiones de Israel (IPS).

«Ha estado en huelga de hambre mucho tiempo, y el personal médico del IPS ha decidido trasladarle. Es mejor que esté en un hospital», ha argumentado. El ministro de Asuntos de Prisioneros de la Autoridad Palestina, Issa Qaraque, ha confirmado la hospitalización.

La semana pasada, un tribunal israelí condenó a Issawi a ocho meses de cárcel a contar desde su última detención, por lo que debería salir de prisión el próximo 6 de marzo. En respuesta, el reo anunció que mantendrá su protesta hasta su liberación.

Issawi forma parte del grupo de 1.027 prisioneros palestinos que fueron liberados por Israel en 2011 a cambio de la entrega del soldado Gilad Shalit, que fue capturado en junio de 2006 por miembros de las Brigadas Al-Qassam –brazo armado de Hamas– y de los Comités de Resistencia Popular. Sin embargo, Issawi fue detenido posteriormente, al igual que otros palestinos de ese grupo.

Cientos de presos palestinos que permanecen encarcelados en prisiones israelíes decidieron la semana pasada convocar un ayuno de un día como muestra de solidaridad con los cuatro reos que están en huelga de hambre para protestar por las condiciones de su confinamiento.

Poco después, el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, mostró su preocupación por el «rápido deterioro» del estado de salud de los presos palestinos en huelga de hambre y apeló a las partes a resolver «sin demora» este conflicto.

Ban Ki Moon hizo público a través de su portavoz un comunicado en el que emplazó a Israel a «respetar plenamente» los derechos de los reclusos palestinos. En este sentido, subrayó la necesidad de que se respeten todos los acuerdos, incluido el derecho de los presos a recibir visitas.

Entre las preocupaciones manifestadas por el máximo responsable de la ONU figura también la denominada ‘detención administrativa’. Según Ban, quienes se encuentran confinados bajo esta fórmula «deben ser imputados y someterse a un juicio con garantías» o quedar inmediatamente en libertad.

Este modelo de detención permite al Gobierno israelí encarcelar a palestinos por un periodo indefinido sin presentar cargos contra ellos.

El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, y el secretario general de la Liga Árabe, Nabil Elarabi, han escrito recientemente a Ban para manifestar su preocupación por este conflicto sobre los presos. El secretario general de Naciones Unidas también trató este tema durante una conversación telefónica con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.