El secretario general de ELA, Adolfo Muñoz, ha afirmado que la huelga general es un instrumento «útil» que «sí sirve para algo» y ha advertido a los trabajadores: «si no nos movilizamos, nos van a machacar».

Muñoz ha comparecido en rueda de prensa en Bilbo acompañado de la secretaria general de LAB, Ainhoa Etxaide, para reiterar el llamamiento a la huelga general que han hecho ambos sindicatos en Hego Euskal Herria para el próximo día 26 junto a otras organizaciones sindicales como ESK, STEE-EILAS, EHNE, HIRU, CGT y CNT y decenas de agentes sociales.

El sistema, ha argumentado Muñoz, «quiere gente dócil y atemorizada, no quiere que se movilice, y traslada la sensación de que hagamos lo que hagamos nos sirve para nada. Mentira. Si no hacemos lo que tenemos que hacer, nos van a machacar», ha asegurado.

Vencer el miedo colectivamente

Ha reconocido que la gente «está atemorizada» pero ha recalcado que al miedo «se le puede vencer como colectivo, viéndonos muchos en la calle», y ha señalado que «sin miedo, el poder económico y el político no son nada».

El secretario general de ELA ha asegurado que con la política «neoliberal» actual no será posible salir de la crisis y ha recalcado que la «derecha gobernante» está haciendo «lo que siempre ha hecho: un trasvase de rentas de lo nuestro a lo suyo; salvar a sus amigos, y consolidar un estado impune, en el que ninguno de los responsables de esta sangría va a ser juzgado».

Muñoz ha anunciado que el Gobierno español «está trabajando ya en la siguiente reforma de pensiones, que va a ser muy dura».

«Como sube el interés de la deuda pública para pagar a los especuladores, para cumplir el límite de déficit, van a descontar de las pensiones y el desempleo», ha pronosticado.

Ha insistido en que la movilización social es útil para hacer cambiar el rumbo de la política y ha puesto como ejemplo el caso de Portugal, cuyo Gobierno, tras las protestas sociales de los últimos días, según ha explicado, se ha mostrado dispuesto a «reconsiderar» la propuesta de rebajar un 7% los salarios con carácter general.

La secretaria general de LAB, Ainhoa Etxaide, ha denunciado la «gestión antidemocrática» que los poderes públicos están haciendo de esta crisis y ha recalcado que la "oligarquía" responsable de ella no está interesada en «generar una alternativa».

Se ha mostrado convencida de que la «agenda política para la intervención del Estado español sigue su ritmo», de que «día a día se están tomando decisiones en ese sentido» y de que «se están negociando de forma oculta lo que van a ser las condiciones de esa intervención».

Unas condiciones que, según Etxaide, supondrán una «nueva vuelta de tuerca» en las reformas estructurales que se están haciendo y que «no tienen más objetivo que establecer una dictadura económica».

En este contexto, ha explicado, la huelga genera convocada para el próximo día 26 será «un paso más para reivindicar una alternativa propia» vasca a la actual política económica consistente en no aplicar los recortes «y apostar por el reparto de la riqueza».

Servicios mínimos

Muñoz, a preguntas de los periodistas, se ha referido a la decisión del Gobierno de Lakua de establecer los servicios mínimos para la huelga general en el 30% en todos los transportes y como un festivo en los centros hospitalarios.

El dirigente de ELA ha recalcado al respecto que si el Gobierno de Gasteiz establece unos servicios mínimos iguales que los aplicados en la anterior huelga general, «incumplirá las sentencias de los tribunales», que «siempre salen con retraso y el Gobierno ignora».

Pero ha advertido de que si reiteradamente se fijan los mismos servicios mínimos, «a sabiendas de que hay sentencias de los tribunales que dicen que no debe ser así», podría «ser constitutivo de prevaricación».