Los firmantes del Acuerdo de Gernika han emitido una nota en la que expresan su postura ante los «lamentables» hechos denunciados ayer por Enara Rodríguez, hermana del preso Arkaitz Rodríguez, que interpuso una denuncia tras ser agredida por supuestos policías cuando regresaba de visitarle en la cárcel de Logroño.

Para los agentes de Gernika, esta «actitud represiva de acoso» contra familiares de presos políticos vascos «no es nueva», pero en este caso «ha excedido todo límite y no hace sino añadir más sufrimiento a los familiares de Arkaitz Rodriguez y a los del resto de presos políticos vascos».

Consideran que lo ocurrido a Enara Rodríguez no es «un caso aislado» y recuerdan que hace ya casi un año que ETA cesó su actividad armada pero «el acoso por parte de los distintos cuerpos de policía españoles hacia la población civil vasca, en general, y contra los sectores populares más comprometidos con este nuevo escenario político, en particular, es axfisiante».

Por ello, han exigido al Estado español que «desactive su maquinaria de guerra y adecúe cuanto antes sus dispositivos coercitivos al nuevo escenario político que vivimos en Euskal Herria».

Los firmantes del Acuerdo de Gernika han reafirmado su compromiso de «seguir impulsando este proceso de paz y normalidad democrática basado en el respeto de todos los derechos humanos» y han llamado a secundar la concentración que tendrá lugar el próximo sábado, a las 12.00, ante el Gobierno Civil en Donostia, bajo el lema «Konponbide garaia da. ¡Desactivación de todas las violencias ya!».

Amaiur pregunta en el Congreso

Por su parte, Amaiur ha presentado en el Congreso dos preguntas dirigidas al Gobierno de Rajoy para que facilite información sobre los hechos denunciados. De esta forma, ha pedido que aclare si el Ministerio de Interior ha abierto alguna investigación interna para identificar si las dos personas que participaron en la agresión a Enara Rodríguez eran miembros de las FSE y para determinar, de ser así, «a qué cuerpo policial pertenecen y cuál es su número de identificación».

La coalición abertzale también ha exigido «el fin del control social y político a Euskal Herria» por parte de las FSE y ha emplazado al Ejecutivo español a que «termine, de una vez y para siempre, con los controles de carretera» que efectivos policiales realizan en Euskal Herria.