Cerca de un centenar de falangistas se concentraron en Bilbo para reivindicar «la unidad de España» al mismo tiempo que la Ertzaintza impedía la protesta antifascista. 15 antifascistas que mostraron su rechazo a la iniciativa fueron detenidos y también uno de los participantes en el acto falangista.

El Departamento de Interior de Lakua ha informado esta mañana que todos han quedado en libertad. Junto a los detenidos, la Ertzaintza ha imputado a medio centenar de personas, delitos contra la Ley de Seguridad Ciudadana por portar armas prohibidas, desordenes públicos y desobediencia.

Por su parte, la plataforma Lau Haizetara Gogoan ha exigido a los responsables institucionales que «den explicaciones por haber permitido la presencia de Falange Española y grupos pronazis en Euskal Herria». Asimismo, ha considerado que, dada la «inoperancia» institucional, «la reacción de autodefensa desarrollada por numerosos ciudadanos» puede calificarse de «natural y democrática».

El alcalde de Bilbo, Iñaki Azkuna, ha considerado incomprensible que se diera permiso a Falange para que se pudieran manifestar cuando «ha demostrado que es un partido poco democrático» y que su presencia iba a motivar altercados.

Asimismo, Bildu de Bilbo ha criticado que se permitiera la concentración.