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BILBO

La PAH de Bizkaia afirma que seguirá haciendo escraches para que se les escuche

La Plataforma de Afectados por la Hipoteca de Bizkaia (PAH) seguirá «en la calle, haciendo las actuaciones que considere pertinentes», aunque sin vulnerar la resolución que avalaba las limitaciones impuestas por la Ertzaintza a los escraches.

La portavoz y abogada de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) Bizkaia, Begoña Barrutia, ha expuesto la postura de la plataforma tras la sentencia del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) que ha desestimado su recurso y el de de Stop Desahucios Gipuzkoa contra sendas resoluciones de la Ertzaintza que establecían limitaciones a los escraches dirigidos a dos diputados del PP.

La letrada ha recordado de que el pasado martes la plataforma hizo entrega de una carta al PP en la que le solicitaba una reunión, sin que «a día de hoy» hayan recibido respuesta, por lo que ha considerado de que «los escraches siguen justificados». «Los escraches empezaron ante una imposibilidad de que nos oigan y nos reciban» ha argumentado.

Según ha explicado, la PAH no pretende «acosar ni intimidar a nadie», sino «acercarse» a los diputados del PP y hacerles llegar su situación «para que, cuando voten, lo hagan de forma informada».

«A pesar de lo que dice la sentencia, no hay voluntad en los escraches, y mucho menos en las plataformas de Gipuzkoa y Bizkaia, de cometer ningún tipo de atentado ni de vulnerar el derecho a la intimidad de ningún parlamentario. Lo único que pretendemos es que tengan un conocimiento claro de la situación y su decisión sea motivada y justificada», ha subrayado.

Por ello, ha anunciado que, «sin vulnerar la resolución», la PAH Bizkaia seguirá «en la calle, haciendo las actuaciones que considere pertinentes» para que se les escuche, ya que no lo hace «en la propias sedes».

Barrutia ha recordado que, «como la sentencia no establece metros, porque no tiene facultad para ello», las plataformas se encuentran con que, «probablemente», pedirán una nueva autorización «a otra distancia» con la que se entienda «que ambos derechos –el derecho a la intimidad y el de manifestación– no se vulneren. Que haya una distancia suficiente de su domicilio pero lo suficientemente cerca para que nos puedan escuchar sin que se sientan amenazados y nos la puedan permitir», ha dicho.

Aunque ha dicho desconocer si esa distancia «podrá ser a 10 metros, 20 o 40», ha apuntado que «no es normal» que la plataforma «haga un escrache a un vecino» que «no tiene que votar nada».

«Si la sentencia nos hubiera dicho 50 metros, sabíamos que los teníamos que pedir 50 metros, pero, al no decirnos distancia alguna, nos podemos encontrar con que, cada vez que hagamos una solicitud a distintos metros, nos sigan diciendo que se sigue vulnerando. Nos dejan un poco desamparados, en ese sentido», ha valorado.