Jon Garay y Nagore Garcia, miembros del movimiento Herrira, se han reunido esta mañana con Jonan Fernández y Mónica Hernando, del equipo de la Secretaría de Paz y Convivencia del Gobierno de Lakua.
En el encuentro, Herrira ha trasladado su preocupación por «las graves vulneraciones de derechos humanos que están cometiendo los gobiernos con los presos y sus familiares». Según el movimiento, mantener medidas de excepción como la dispersión, la doctrina 197/2006 o la situación de los presos enfermos, «son decisiones políticas que pueden suponer más muertes en cualquier momento».
Por ello, han pedido a los miembros de esta secretaría «una mayor implicación institucional para detener cuanto antes estas graves vulneraciones de derechos humanos».
Según Herrira, el final de las medidas de excepción y la adaptación de la política penitenciaria al nuevo tiempo político «son demandas mayoritarias en la sociedad vasca, y creemos que también las instituciones se deben hacer eco de este mandato».
Esta reunión se enmarca en la dinámica de contactos que inició Herrira tras las marchas de Baiona y Bilbo, con el objetivo de llevar al ámbito político y a las instituciones «el amplio consenso que existe en la sociedad vasca en la necesidad de superar estas políticas penitenciarias de excepción».