Un día después de que el president, Artur Mas, compareciese para explicar que la construcción de estructuras de estado sigue siendo una prioridad y el mismo día en que el Gobierno griego ha anunciado que cierra la televisión pública, la Corporació Catalana de Mitjans Audiovisuals (CCMA) –en la que se engloban TV3 y Catalunya Radio– ha anunciado la presentación de un ERE con el objetivo de despedir a más de 300 trabajadores de los medios de comunicación públicos.

La decisión se ha tomado en el Consejo de Gobierno de la CCMA celebrado esta mañana, después de dar por finalizada unilateralmente la negociación con los trabajadores, que en los últimos meses se han movilizado en numerosas ocasiones, advirtiendo de la intención de la dirección de presentar un ERE.

Pese a que el presidente de la CCMA, Brauli Duart, había insistido en que el ERE sería solo la última opción, el expediente llega sin haber agotado la negociación con los trabajadores. La realidad es que ya en el mes de marzo trascendió que el anteproyecto de presupuestos contemplaba un recorte del 18% en el capítulo de personal, para lo cual el Consejo de Gobierno proponía unas rebajas salariales que podían llegar hasta el 35% en algunos casos.

Los medios públicos han sido una de las principales víctimas de los recortes de la Generalitat desde que CiU la recuperó en 2010. De hecho, de los 330 millones de euros consignados en los presupuestos de 2010 se pasó a 260 millones en 2012. Aunque las cuentas de este año no están cerrados, está previsto que en 2013 se destinen 225 millones, de manera que en tres años el recorte ha sido prácticamente de un tercio.

La televisión pública TV3 es la que más personal tiene, con 2.095 trabajadores, mientras que Catalunya Radio emplea a 426 personas, a las que hay que sumar una cincuentena de trabajadores destinados a servicios corporativos. Los trabajadores ya han convocado una asamblea extraordinaria esta tarde, con el objetivo de acordar las medidas de protesta ante el anuncio de la dirección.