Dos vecinos del barrio donostiarra de Antiguo acudieron el pasado 14 de abril al partido que la Real disputó en Madrid contra el Rayo Vallecano.
Según ha podido saber NAIZ, en el minuto 35 de la segunda parte del encuentro ambos fueron sacados del campo e identificado contra la pared por la Policia española por mostrar dos banderolas (con los lemas ‘Euskal presoak eta iheslariak etxera’ y ‘Euskal Presoak Euskal Herrira’) y una ikurriña.
Los dos aficionados han recibido ahora sendas multas de 3.500 euros y la prohibición de acudir a estadios de fútbol en un periodo de tiempo de seis meses. El motivo, «mostrar consignas ilegales en un un campo de fútbol».