MIKEL INSAUSTI
CRíTICA: «Molière en bicicleta»

Entre la misantropía y la adoración por los actores

Con los actores no hay término medio, o se les odia o se les ama. Y ese sentimiento contrapuesto que provocan en el público lo expresa muy bien Philippe Le Guay en su comedia dramática «Alceste à bicyclette», a la que se le ha cambiado el título fuera del mercado francófono, por el temor al desconocimiento de la obra teatral de Molière «El misántropo». En ella el protagonista es Alcestes, y las dos estrellas de la película se disputan el papel, así que se trata de un personaje con suficiente importancia como para que su nombre no se pierda por el camino.

De los dos el más identificado con Alcestes es Fabrice Luchini, que por algo ha colaborado en la escritura del guión. No duda en autoparodiarse como «divino» de la interpretación, y como auténtico misántropo que vive en la isla de Ré alejado del mundanal ruido. Por lo que, quiera o no quiera, Lambert Wilson ha de conformarse con ser Filinto, el amigo y a la vez rival.

La competencia entre ambos existe en la vida real, y de momento en prestigio el que va ganando es Luchini, que cuenta en el cine con un César y ocho nominaciones, y en el teatro con tres nominaciones al Molière. Wilson se ha de conformar con seis nominaciones al César y un par al Molière, aunque comercialmente goza de más éxito que su colega.

En cierto grado no cabe duda de que se están interpretando a sí mismos, igual que ocurría en el duelo que Michael Winterbottom orquestó entre Steve Coogan y Rob Brydon para «The Trip». La diferencia cultural hace que aquí el enfrentamiento no sea tan ácido como en el caso de la película inglesa, al optar por un tono más amable y cercano al de las realizaciones recientes de Jean Becker a partir de «Conversaciones con mi jardinero».

Ni el uno llega a ser un escéptico total, ni el otro un completo interesado, en la medida en que ambos muestran su lado tierno y se hacen querer a pesar de su evidente y nada disimulada egolatría. Son grandes actores haciendo de grandes actores, con su corazoncito escondido bajo la pose altiva.